El centro Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia – ICET y los vecinos del barrio malagueño de El Palo, junto con Stroke Art, un equipo de graduados en Bellas Artes en Málaga, han iniciado recientemente su proyecto de arte urbano “La Red que nos une”, un proyecto que durará dos años y creará obras de arte en más de 2.000 metros cuadrados de muros.
Stroke Art tiene como objetivo el desarrollo de proyectos artísticos en torno a la educación, la defensa y la difusión de las artes en centros educativos. Con esta actuación pretende promover el arte entre los niños de forma amena y cercana, así como difundir el conocimiento sobre la pintura mural. Además, la iniciativa tiene un marcado carácter jesuita, ya que los temas seleccionados para los murales entroncan con los valores de la enseñanza ignaciana, el amor y sensibilidad por la naturaleza, el juego como base del aprendizaje (restaurando juegos tradicionales en los patios), la literatura y la idiosincrasia de uno de los barrios más tradicionales de Málaga.
En el mes de febrero se puso en marcha en el colegio SAFA-ICET este proyecto que nace de la colaboración entre la comunidad educativa y el colectivo Stroke Art, dentro del proyecto de estos últimos “Vivir y sentir el patrimonio”, con el objetivo de hacer más acogedor y bello el espacio educativo, integrándolo aún más en el barrio en que se inserta y destacando sus principales señas de identidad. Esta labor ha involucrado, pues, también a vecinos y colectivos del barrio malagueño de El Palo.
El valor de la iniciativa radica en la implicación del alumnado, profesorado, vecinos y colectivos del barrio para llevar a cabo un aprendizaje-servicio a través del arte, siendo todos ellos protagonistas de la transformación de su entorno y la creación de espacios de encuentro en los que se fomente la convivencia, la cultura, la educación emocional, la motivación y el empoderamiento.
Esta actuación ha sido realizada con el patrocinio de Fundación Málaga y el Ayuntamiento de Málaga, por medio del programa “Málaga Más Bella” del Área de Derechos Sociales y Participación Ciudadana y el Distrito Este, donde se localiza El Palo. Además, se ha contado con la colaboración de Copicentro y la Empresa Malagueña de Transportes (EMT).
El proyecto contempla un total de seis intervenciones durante los próximos dos años, tanto en el interior del propio centro (patios de Infantil y Primaria, comedor, escaleras), como en los muros exteriores, que abarcarán más de 2000 metros cuadrados.
La primera fase, que ha concluido con la pintura del muro del centro que da a la Avenida Salvador Allende, arrancó en el mes de marzo con distintos talleres a los que asistieron alumnado, profesorado, directivos del centro y vecinos del barrio.
Una vez a la semana durante dos meses participaron en los talleres para elaborar unas plantillas, a partir de una serie de imágenes y fotografías recopiladas por los participantes, en base a cinco temáticas que responden a cuestiones sobre qué significa para ellos el colegio y el barrio: educación, la vida de barrio, la pesca, la religión y la apertura del centro educativo. Estos talleres fueron claves para recabar los contenidos y las imágenes que reflejaran la esencia del barrio y la labor del colegio en El Palo a través del imaginario colectivo. Tras ellos, se llevó a cabo la pintura de la parte superior de la fachada, a cargo de un artista profesional del colectivo Stroke Art, en la que se plasman los motivos y valores surgidos en los talleres: elementos representativos del barrio, como la cultura de la pesca y el mar. Todo ello, junto con la esencia del centro educativo y la frase de la congregación jesuita “En todo amar y servir”.
La segunda intervención se localiza en la parte inferior de esa misma fachada trasera, concretamente en la tapia que define el límite norte del centro educativo. Esta intervención ha sido realizada por las alumnas y alumnos, profesorado y vecinas y vecinos del barrio con las indicaciones y plantillas elaboradas en los talleres y la coordinación de los miembros de Stroke Art, y ha consistido en crear una composición utilizando una red de pesca que recoge y cose, a modo de hilo conductor, el imaginario de identidades culturales y sociales de El Palo. De aquí nace el nombre del proyecto, “La red que nos une”, ya que el centro, a lo largo de su historia, ha sido un punto de unión entre las vecinas y vecinos del barrio de El Palo.
Esta primera actuación, que ha dado nueva vida a la fachada del centro, fue inaugurada el día 11 de abril contando con la asistencia del alcalde D. Francisco de la Torre, en un sencillo y breve acto presentado por la Directora del Centro, Dª. Pilar Casares, en el que miembros de la Comunidad Educativa realizaron una performance alegórica de los motivos y valores puestos de manifiesto en el mural.
Una experiencia única, sin duda, que ha estrechado aún más los lazos entre la Comunidad Educativa y su barrio y que seguirá dando sus frutos en los próximos meses.